Comprender cómo un medicamento se desplaza y actúa dentro del organismo es fundamental para entender su eficacia. El Dr. Liang Willmann, investigador del Departamento de Farmacología y Farmacia de la Facultad de Medicina LKS de la Universidad de Hong Kong (HKUMed), ha detallado el proceso que sigue un fármaco desde su ingestión hasta que ejerce su efecto terapéutico, según una publicación reciente.
La mayoría de los medicamentos se administran por vía oral o inyectable. La administración oral es la más común y preferida por su comodidad para el paciente. Este método incluye presentaciones sólidas, como pastillas y cápsulas, y líquidas, como jarabes y suspensiones. El Dr. Willmann explica el recorrido de estos fármacos orales.
Puntos Clave
- La mayoría de los medicamentos se ingieren por vía oral.
 - El intestino delgado es el principal lugar de absorción.
 - El hígado metaboliza el fármaco antes de su distribución.
 - El corazón bombea el fármaco a las zonas afectadas.
 - La dosificación regular mantiene la concentración efectiva en sangre.
 
Ingreso y Absorción del Fármaco
Una vez que el medicamento se ingiere, inicia su trayecto por el sistema digestivo. Primero atraviesa el estómago, donde puede comenzar a disolverse. Luego, llega al intestino delgado, considerado el sitio principal para su absorción.
En el intestino delgado, las moléculas del fármaco pasan a través de la pared intestinal y entran en el torrente sanguíneo. Es importante destacar que no todo el medicamento ingerido se absorbe; una porción puede no ser asimilada y se elimina directamente del cuerpo a través de las heces.
Dato Interesante
Hasta un 30% de un fármaco oral puede no ser absorbido y ser excretado, dependiendo de su formulación y de las características individuales del paciente.
El Papel del Hígado en la Metabolización
Después de la absorción en el intestino, el fármaco no se distribuye inmediatamente por todo el cuerpo. En su lugar, es transportado al hígado a través de los vasos sanguíneos intestinales. Este proceso es conocido como el efecto de primer paso hepático.
En el hígado, las células hepáticas contienen enzimas que comienzan a descomponer químicamente la mayor parte de la sustancia del medicamento. Este proceso, llamado metabolismo, puede transformar el fármaco en compuestos inactivos o, en algunos casos, en metabolitos más activos.
"El hígado actúa como un centro de procesamiento crucial, modificando la estructura química de los fármacos. Esto es vital para su activación o eliminación," afirma el Dr. Liang Willmann.
Mientras que algunos medicamentos pierden su actividad terapéutica durante este proceso hepático, otros permanecen activos. Estos fármacos activos o sus metabolitos pasan a la circulación general. Lo hacen a través de la vena hepática, que los lleva directamente al corazón para su posterior distribución.
Distribución del Medicamento en el Organismo
Una vez que el fármaco activo alcanza el corazón, este órgano vital lo bombea, junto con la sangre, a todas las partes del cuerpo. El medicamento se distribuye a diferentes destinos, cada uno con una función específica en su acción o eliminación.
Los principales destinos de distribución incluyen:
- Zonas Afectadas: El fármaco se dirige a los tejidos u órganos donde debe ejercer su acción terapéutica. Por ejemplo, un analgésico se distribuirá a los lugares de dolor.
 - Órganos de Eliminación: Algunos órganos, como los riñones, filtran el medicamento de la sangre, contribuyendo a su eliminación del cuerpo a través de la orina.
 - Regreso al Hígado: Una parte del fármaco puede volver al hígado, donde continúa siendo metabolizado en ciclos posteriores.
 
Con el tiempo, la concentración del medicamento en la sangre disminuye progresivamente. Esto ocurre tanto por su transformación química en el hígado como por su excreción a través de los riñones u otras vías.
Contexto
La velocidad de distribución y eliminación varía significativamente entre los diferentes medicamentos. Factores como el tamaño molecular, la solubilidad en grasas y la unión a proteínas plasmáticas influyen en cómo el fármaco se mueve por el cuerpo.
Importancia de la Dosificación y Adherencia
El ciclo constante de absorción, distribución, metabolización y eliminación es la razón por la que muchos medicamentos deben tomarse a intervalos regulares. Este esquema de dosificación asegura que se mantenga una concentración suficiente del fármaco en la sangre.
Mantener una concentración adecuada es crucial para que el medicamento pueda ejercer su efecto terapéutico de manera continua. Si la dosis es irregular, la concentración puede caer por debajo del nivel efectivo, o aumentar a niveles tóxicos.
Factores que Influyen en la Eficacia
La eficacia de un medicamento no depende solo de su recorrido en el cuerpo, sino también de varios factores:
- Dosis: La cantidad de medicamento administrada. Una dosis incorrecta puede ser ineficaz o peligrosa.
 - Forma Farmacéutica: Si es una cápsula, pastilla, jarabe, etc. La formulación influye en la velocidad y el lugar de absorción.
 - Condición Clínica del Paciente: Factores como la edad, el peso, la función hepática o renal, y la presencia de otras enfermedades pueden alterar cómo el cuerpo procesa el fármaco.
 
Una vez que el médico ha definido un tratamiento, es esencial que el paciente siga las indicaciones al pie de la letra. Esto incluye la dosis, la frecuencia y la duración del tratamiento.
Estadística Clave
La falta de adherencia al tratamiento farmacológico se estima que es responsable de hasta el 50% de los fracasos terapéuticos en enfermedades crónicas, según estudios de salud pública.
En resumen, aunque los efectos específicos de cada fármaco pueden variar según la enfermedad que se trate y el tipo de sustancia activa, el principio fundamental de su acción en el cuerpo es similar. Todos deben llegar a su lugar de acción, cumplir su función terapéutica y, finalmente, ser eliminados del organismo para garantizar la seguridad y eficacia del tratamiento.




