En un reciente pronunciamiento, el Dr. Gonzalo Grebe Barros, Profesor y Exdecano de la Pontificia Universidad Católica de Chile, reafirmó la importancia de la medicina en el respeto a la vida y la dignidad humana. Su declaración surge en el marco del actual debate sobre la eutanasia, destacando principios éticos fundamentales para la práctica médica.
El Dr. Grebe Barros enfatizó que la función del médico no debe incluir la participación en actos que atenten contra la conciencia profesional o que impliquen la ejecución de la muerte de un paciente. Esta postura se alinea con documentos históricos y contemporáneos que guían la ética médica global.
Puntos Clave
- La medicina debe respetar la vida y la dignidad humana.
- Los médicos no deben participar en actos que atenten contra su conciencia.
- La eutanasia no es la solución al sufrimiento; los cuidados paliativos sí lo son.
- Se defiende la vida hasta su término natural.
Principios Éticos en la Práctica Médica
El Profesor Grebe Barros fundamentó su posición en dos pilares éticos cruciales: el Juramento Hipocrático y la Declaración de Ginebra. Ambos textos establecen un marco para la conducta profesional de los médicos, priorizando la preservación de la vida y el bienestar del paciente.
El Juramento Hipocrático, un compromiso ancestral en la medicina, subraya el deber de no hacer daño y de aplicar los conocimientos para el beneficio de los enfermos. Por su parte, la Declaración de Ginebra, adoptada por la Asociación Médica Mundial, renueva estos principios en un contexto moderno, destacando el respeto por la vida humana desde su concepción.
«La medicina debe respetar la vida y la dignidad humana, citando al Juramento Hipocrático y la Declaración de Ginebra.»
En este sentido, el Dr. Grebe Barros argumenta que la esencia de la profesión médica es sanar y aliviar, no terminar con la vida. La formación de un médico se centra en preservar la salud y combatir la enfermedad, lo que contrasta con la idea de inducir la muerte, incluso si es por solicitud del paciente.
Dato Relevante
El Juramento Hipocrático data del siglo V a.C. y es uno de los textos éticos más antiguos y reconocidos en la medicina occidental. La Declaración de Ginebra fue adoptada por primera vez en 1948 por la Asociación Médica Mundial, y ha sido revisada varias veces, la última en 2017.
La Eutanasia y el Rol del Médico
El debate sobre la eutanasia plantea interrogantes complejos sobre la autonomía del paciente y la responsabilidad del médico. El Dr. Grebe Barros sostiene que el médico no debe convertirse en "ejecutor de la muerte". Esta perspectiva enfatiza que la objeción de conciencia es un derecho fundamental del profesional de la salud.
La objeción de conciencia permite a los médicos negarse a participar en procedimientos que consideren moral o éticamente inaceptables. Este derecho es reconocido en diversas legislaciones internacionales y nacionales, protegiendo la integridad profesional del médico.
Según el Dr. Grebe Barros, la solicitud de un paciente para la eutanasia, aunque expresión de autonomía, no debe obligar al médico a actuar en contra de sus principios éticos fundamentales. La relación médico-paciente se basa en la confianza y el cuidado, no en la facilitación de la muerte.
Contexto del Debate
El debate sobre la eutanasia es global y se intensifica en muchos países. Actualmente, la eutanasia es legal en naciones como los Países Bajos, Bélgica, Luxemburgo, Canadá, Nueva Zelanda, España y algunos estados de Australia. La asistencia médica al suicidio es legal en varios estados de Estados Unidos y en Suiza. Las leyes varían significativamente en cuanto a las condiciones y requisitos para su aplicación.
Cuidados Paliativos como Alternativa al Sufrimiento
En lugar de la eutanasia, el Dr. Grebe Barros propone un enfoque centrado en la mejora de los cuidados paliativos y el acompañamiento humano. Esta alternativa busca aliviar el sufrimiento físico, psicológico, social y espiritual de los pacientes con enfermedades graves y terminales.
Los cuidados paliativos se definen como la atención activa y total de pacientes cuya enfermedad no responde a un tratamiento curativo. El objetivo es proporcionar la mejor calidad de vida posible para los pacientes y sus familias. Esto incluye el control del dolor y otros síntomas, así como el apoyo emocional y espiritual.
- Control del dolor: Uso de medicamentos y terapias para manejar el sufrimiento físico.
- Apoyo psicológico: Asistencia para pacientes y familiares frente a la ansiedad y la depresión.
- Acompañamiento espiritual: Respeto y apoyo a las creencias y valores del paciente.
- Mejora de la calidad de vida: Enfoque en el bienestar integral del paciente hasta el final de su vida.
Fortalecer estos servicios es, para el Dr. Grebe Barros, la verdadera solución al sufrimiento, sin necesidad de recurrir a la eliminación del enfermo. Se trata de humanizar el proceso de final de vida, proporcionando consuelo y dignidad.
Inversión en Cuidados Paliativos
Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), se estima que solo un 14% de las personas que necesitan cuidados paliativos los reciben a nivel mundial. Esto subraya la necesidad de una mayor inversión y desarrollo en esta área. En Chile, al igual que en muchos otros países, existe un desafío significativo para asegurar que estos servicios estén disponibles y sean accesibles para todos los que los requieren.
El Dr. Grebe Barros enfatiza que la dignidad humana se mantiene hasta el último aliento. La medicina, en su esencia, debe honrar este principio, defendiendo la vida hasta su término natural. Cuestionar la eutanasia basada únicamente en la autonomía del paciente no niega dicha autonomía, sino que busca ofrecer un camino que respete la integridad de la vida y el rol ético del médico.
Esta perspectiva invita a una reflexión profunda sobre cómo la sociedad y el sistema de salud pueden abordar el sufrimiento de manera compasiva y ética, sin comprometer los principios fundamentales de la medicina.



